
01 Jun Primera Boda en Murcia Durante la Desescalada
Justo hoy hemos vuelto a sonreir, a disfrutar de la música en directo, a disfrutar de cada beso y abrazo. Y es que justo hoy hemos hecho nuestra primera boda en la desescalada del coronavirus.
Estábamos nerviosos por saber como serían los nuevos métodos o protocolos, pero hemos de decir que ha sido genial. Hemos podido disfrutar de cada nota, poniendo como siempre el corazón en cada una de ellas.
Ha sido una boda familiar e íntima donde sólo han acudido los más cercanos a los novios. Y es que aún así se ha podido notar la alegría, alguna lágrima que otra de ver cómo están todos bien.
Hoy hemos tocado con nuestro trío de violín, piano y soprano. Perfecto para bodas intimas, iglesias pequeñitas pero que sienten devoción por la música en directo.
Lo primero ha sido interpretar la entrada del novio, Canticorum Jubilo y para la entrada de la novia La cantata 147 de Bach. Una versión instrumental que nos ha puesto a todos los pelos de punta.
Para las lecturas, como es de costumbre y que nunca falla, hemos interpretado el Alleluya de Cohen, donde nuestra soprano ha puesto todo su corazón y sentimiento para llegar a emocionar.
Para la imposición de anillos siempre nos encanta tocar algo de fondo, algo flojito pero suficiente para que sea la banda sonora perfecta al momento más importante de a ceremonia. Ha sido el canon de Pachelbel, una versión romántica y lenta perfecta para endulzar los dos corazones de los novios.
Seguimos con el ofertorio, un momento muy especial donde los invitados ofrecen sus mejores palabras a los protagonistas. Seguido de nuestra propia versión del Ave María de Schubert, una obra de pies a cabeza donde es súper importante la elección de una buena soprano o tenor.
Para las firmas los novios eligieron algo más animado pero que no se fuera de madres en la iglesia como O Mio Babbino Caro, una obra especialmente bonita y más todavía si se pone durante las firmas, donde ya estás más relajado y puedes disfrutar de toda la música en su total esplendor.
Y para la salida no podía faltar el Aleluya de Haendel, una obra mítica donde tenemos nuestra propia versión reducida para trío de cuerdas, Piano con cuarteto y coral de voces.
Está claro que todavía queda un poquito para hacer bodas con total naturalidad pero esto es un gran paso para ver la luz al final del túnel y poder ver esos bodorrios que no encantan tanto a todos nosotros.